Antes de decidirnos a comprar una bicicleta plegable es conveniente informarnos para ver si este tipo de bicis son las que más se adecúan a nuestras necesidades, así que podemos optar por recurrir a aquel amiguete que lo sabe todo sobre bicicletas o, bromas aparte, podemos contrastar con diversas fuentes las ventajas y desventajas de las bicicletas plegables.
Entre las principales desventajas de las bicicletas plegables o folding bikes aparece el hecho de que son 100% urbanas, por lo que para un usuario acostumbrado a hacer salidas por el campo o la montaña supondría en todo caso un gasto extra y mantener dos criaturas sobre ruedas en casa. Que quede claro, las plegables no se han diseñado para uso deportivo, ni siquiera en asfalto. El precio puede ser además otras de las desventajas de las bicicletas plegables, ya que si somos "compradores de marcas", no encontraremos Brompton nueva -por citar la marca por excelencia dedicada a la fabricación de la bicicleta de ciudad plegable- por debajo de los cuatro dígitos.
A pesar de su aparente fragilidad, una bici plegable normal puede adaptarse a la "dura" vida de las ciudades, aunque habrá obstáculos que se salvarían mucho mejor sobre otro tipo de bicis, como las mountain bikes sin ir más lejos -podemos comprar algunas con doble suspensión con precios muy económicos- o en un terreno mucho más especializado las bicis bmx. Además, hay que tener presente que no todas las bicis se pliegan y se despliegan con la misma facilidad y que su peso en algunas ocasiones puede ser un inconveniente que quizás no habíamos tenido en cuenta inicialmente.
La gran competencia existente en las ciudades con otros tipos de bicis igualmente urbanitas también puede ser un elemento que se acabe sumando a la lista de desventajas de las bicicletas plegables. Por un lado por usabilidad, porque si sólo podemos hacer frente a un desembolso poco tienen que decir ante las bicis de montaña; por otro lado por comodidad, porque según el uso que les demos están en desventaja ante todo sobre bicicletas de paseo; y finalmente porque si atendemos a las modas que vienen y van, las últimas que les han ganado una parte de la calle han sido las bicicletas fixie y las bicis bmx.
¿Estabas a punto de comprarte una plegable y te has desanimado ante el panorama que hemos dibujado? No desesperes y acaba de leer todo el texto, porque en este análisis de las ventajas y desventajas de las bicicletas plegables ahora le llega el turno a las ventajas. Que son muchas y muy significativas respecto a otros tipos de bicis.
Entre las ventajas, la primera que cabe reseñar es, obviamente, el poco espacio que ocupan una vez plegadas. Esto la convierte sin discusión en la mejor amiga del oficinista y de muchos otros profesionales, que pueden albergarla en su lugar de trabajo ocupando muy poquito espacio. De vuelta a casa, se pueden incluso guardar en un armario, mientras que otras bicis no pueden encontrar acomodo sin incomodarnos más que en el recibidor o en el balcón, en el caso de disponer de alguno de estos espacios. Y, aunque suene a broma, el hecho de poder subirla y bajarla en el ascensor sin miedo a que ensucie el elevador o cause algún desperfecto en la escalera de nuestro edificio, puede ahorrarnos infinidad de discusiones y malas miradas de nuestros vecinos. Quien los haya sufrido en alguna ocasión sabrá ponderar debidamente este punto entre el balance entre ventajas y desventajas de las bicicletas plegables.
Poder aparcarlas bajo cubierto y muy cerquita nuestro no tiene precio, ya que las aleja por completo de la acción de los cacos y las protege de las inclemencias del tiempo. Y, de paso, eso que nos ahorramos en candados.
La movilidad y el transporte son otros puntales favorables de las bicicletas plegables. Algunas personas que viven a decenas de quilómetros de distancia de su lugar de trabajo se ven beneficiadas sobremanera al elegir una bicicleta de ciudad plegable para colaborar en el desplazamiento, ya que por su reducido espacio pueden subirse sin excesivos problemas a otros medios de transporte como bus, metro o ferrocarril. Si se usan estos medios para realizar el recorrido más largo, las bicis plegables se convierten en perfectas aliadas para realizar el tramo desde la parada o la estación hasta nuestro lugar de destino.
Además de permitirnos desenvolver con soltura por largos tramos urbanos e interurbanos, añadimos a las ventajas que caracterizan a una bici plegable normal el hecho de que es mucho más sencilla de transportar en un coche que otro tipo de bicis. En muchos vehículos no habrá problemas para alojarla en el maletero, y nos ahorraremos un buen puñado de euros en accesorios extra, como el portabicis trasero, la placa reflectante y el duplicado de la matrícula. En largos viajes, si hacemos alguna parada no hará falta estar constantemente con un ojo puesto en la bici por si algún amigo de lo ajeno se le acerca más de la cuenta, como sí pasa cuando las tenemos que transportar en el exterior del vehículo.
Si antes colocábamos el precio entre las desventajas por el peligro de quedar deslumbrados por atractivas y míticas (y carísimas) marcas de folding bikes, ahora colocamos este elemento en el saco de las ventajas en este análisis de las principales ventajas y desventajas de las bicicletas plegables, ya que con el paso de los años y el desarrollo de la industria "bicicletera" se han llegado a poner en el mercado muchos modelos de bicicletas plegables baratas. Es el caso de Biciprix.com, un outlet online especializado en el mundo de las dos ruedas en el que se pueden comprar bicicletas plegables baratas fiables (First Class: cuadro de aluminio 7005, cambio Shimano, muy ligeras) por tan solo 139 euros más IVA.
Finalmente, una ventaja cualitativa más es que además de la bici plegable normal, también podemos encontrar en el mercado bicicletas plegables eléctricas. Allá donde no llegue nuestro pedaleo llegará el motor con el que van equipadas. En Biciprix.com también disponen de bicicletas plegables baratas con asistencia al pedaleo. Las EBike 20 se pueden adquirir en este comercio online por 595 euros más IVA, cuando su precio en otros distribuidores superaría con creces los 1.000 euros.
Esta exposición de ventajas y desventajas que acabamos de reseñar quizás no sirva para convertirnos en expertos que lo saben todo sobre bicicletas plegables. Pero seguramente nos ayudará a decidirnos si la próxima bicicleta que entra en casa es una bici plegable normal (o eléctrica) o no.
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