La necrosis ósea se presenta cuando hay una falta de circulación sanguínea en partes concretas del hueso, al no recibir sangre el hueso, muere. Hay un aumento de la presión intraósea como consecuencia de una respuesta inflamatoria. Pasado un tiempo, en los estadíos más avanzados, se produce una destrucción irreversible del hueso subcondral y cartílago articular.
La necrosis ósea se debe tratar en los estadíos iniciales de la forma menos agresiva para evitar su evolución a fases más graves de la enfermedad.
El tratamiento conservador está indicado en los estadíos I y II que son potencialmente reversibles, mientras que en los estadíos III y IV se asocian con destrucción irreversible articular.
Existen tratamientos hoy en día que solucionan los dolores articulares provocados por la osteonecrosis, resolviendo la limitación articular y, en algunos casos se evita el colapso total del hueso por falta de irrigación sanguínea y la colocación de la prótesis quirúrgica. Uno de estos métodos es la bioestimulación mediante láser. En concreto se trata de una forma muy específica de usar la magnetoterapia y la laserterapia entre otros. El objetivo de esta terapia es trabajar la zona ósea exacta y concreta que está colapsada por falta de riego sanguíneo. Como ejemplo, dentro de la pestaña de casos clínicos; se anexan imágenes objetivas y cuantiativas del estado de la rodilla de un paciente, antes y después del tratamiento de bioestimulación mediante láser.