Llegó con bastón y ahora monta en bicicleta. Adela vive en la residencia Artevida Sanchinarro desde hace dos meses y ya le ha cambiado la vida. Los talleres de terapia ocupacional, la rehabilitación, la asistencia sanitaria y control alimenticio, así como ayudar a sus compañeros menos autónomos la ayudaron a aparcar el bastón y comenzar una nueva etapa de su vida. "Me he soltado la melena desde que vivo en la residencia. Hasta mi nieto se ríe de mí y no se cree que realmente ya no necesite el bastón", comenta feliz.
El centro, que se inauguró el pasado mes de marzo, acoge tanto a mayores autónomos como dependientes físicos y cognitivos, para los que cuenta con una unidad especial dotada de un sistema de control de presencia. "Son personas totalmente dependientes, que pueden desorientarse o caer, por lo que extremamos las medidas de seguridad", comenta Ramón Rubio, director del centro.
Tras ingresar en la residencia y pasar una evaluación integral cognitiva, conductual y emocional, los mayores más autónomos participan en talleres para mantener su independencia ya que pueden perder movilidad en los brazos y piernas al contar con auxiliares que les ayudan a realizar actividades cotidianas como vestirse.
Estos mayores colorean, abren y cierran cerrojos y juegan con piezas articuladas, aunque no dudan en contestar que su entretenimiento preferido es el bingo. "Pasamos el día muy entretenido. A mi me gusta hacer bicicleta por las tardes", explica Adela.
PUERTAS ABIERTAS
Este centro será uno de los primeros que la Comunidad abrirá al público entre el 25 de abril y el 13 de junio, una experiencia pionera en España que pretende acercar a los madrileños el trabajo que realizan los profesionales de los servicios sociales de la región con las personas que están en situación de dependencia "Queremos que los ciudadanos vean en esta iniciativa la voluntad de la Comunidad de Madrid de gestionar cada día con mayor eficiencia y total transparencia las necesidades y expectativas de todos los madrileños", aseguró Engracia Hidalgo, consejera de Familia y Servicios Sociales.
Con la iniciativa también se pretende desmitificar las residencias y la idea de que son un lugar donde abandonar a los mayores. "Yo misma pedí plaza porque no quería ser una carga para mi hijo", comenta Adela.
Esta vecina de Carabanchel de 76 años ocupa una de las 180 plazas de la residencia de mayores de Sanchinarro, la número 500 inaugurada por la Comunidad y a la que, entre 2010 y 2011, se sumarán otros diez nuevos centros en Madrid capital, Ciempozuelos y El Berrueco, que ya están prácticamente construidos, tal y como informó Miguel Ángel García, director general de Atención a la Dependencia. "Seguiremos trabajando en sacar más plazas", añadió García.
"ES MÁS COSTOSA UNA PLAZA PÚBLICA"
La Comunidad ha apostado por el modelo de colaboración público-privado en las residencias de mayores. "La plaza pública tiene unos costes directos a la administración por lo que es más costosa que una concertada", explica Miguel Ángel García, director general de Atención a la Dependencia.
García asegura que dicha colaboración asegura la calidad y el confort, y disminuye los costes, aunque concreta que Madrid mantiene un equilibrio entre centros públicos y concertados. De hecho, los diez nuevos centros serán públicos.
La Comunidad destina 900 millones a atender situaciones de dependencia, lo que supone una inversión de casi 2,5 millones al día. Además, García explica que se destinan 180 euros por persona al día, mientras que otras comunidades invierten 140.
Etiquetas: geriatrico madrid, geriatricos, geriatricos madrid, jornada puertas abiertas, residencia artevida, residencia madrid, residencia mayores, residencias, sanchinarro, terapia ocupacional
Noticias relacionadas
La consejera de Familia y Asuntos sociales Dª Engracia Hidalgo inauguró el domingo día 28 de ...