Emprendedores en tiempos de crisis

REPORTAJE
Isidro Velicias y Sebastián Alonso se han lanzado a la aventura de crear su propio negocio • Saben que no es el mejor momento, pero a ambos les avala una importante experiencia que conf ian en aprovechar para poder sacar adelante sin problemas sus pequeñas empresas

M.J.C. BENAVENTE
Hace poco más de un mes que han puesto en marcha sus negocios. Son jóvenes, nacidos en Benavente y la actual crisis económica no les ha frenado a la hora de decidirse a crear sus propias empresas. Isidro Veicias ha querido aprovechar la experiencia adquirida desde niño en el negocio de su padre para recuperar parte de lo que fue la empresa familiar. Isvelan es el nombre de su negocio dedicado al mantenimiento de garajes automáticos y la salida a una situación que le había llevado a estar en paro. 'Al no encontrar trabajo me decidí a montar mi propia empresa. Aunque llevo poco tiempo, todo va bien, van -surgiendo cosas y estoy recuperando a antiguos clientes
que tenía mi padre", comenta. Asegura que las ayudas son escasas, mientras que la inversión que tienes que realizar es importante para comprar herramientas, -material y el vehículo para trabajar. "No he recibido ninguna ayuda; he solicitado la subvención de la Junta, pero sirve para poco, además tú inviertes sin tener la certeza de que te la van a dar' explica.
Esta misma opinión la comparte Sebastián Alonso, quien está al frénte de ITC Ingeniería, una empresa que ofrece servicios integrales ecoeficientes. "Cualquier pequeño negocio requiere una inversión y tienes que contar con que el primer año no vas a tener los ingresos esperados", afirma. Alonso se marchó hace ocho años a Barcelona, donde ha trabajado en una importante empresa de ingeniería, y ahora ha decidido regresar a su ciudad por motivos familiares. "Tengo experiencia, pero aquí te enfrentas a que eres el nuevo, además joven y desconfían de ti", lamenta, aunque
con su trabajo espera atender partes que ahora no están cubiertas, como son las nuevas tecnologías y las energías renovables.
Ambos confían en que en poco tiempo sus negocios se irán haciendo un hueco en el sector empresarial de la ciudad. Entre sus temores no está el no tener clientes, pero sí los impagos. Como asegura Isidro Veicias, "los impagos hacen caer a una empresa y en la provincia están acostumbrados a pagar tarde".
Ilusión y ganas no les faltan a estos jóvenes emprendedores que animan a otros benaventanos que estén en una situación similar a dar el paso de montar su propia empresa, "pero con paso firme, porque te puedes llevar desilusio-
nes", subrayan, y, sobre todo, reclaman a las instituciones un mayor esfuerzo para fomentar el empleo joven en la provincia.

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