Desde hace 20 años, es una referencia y sinónimo de calidad en joyas bañadas en oro de 18 kilates.
La gran cantidad de oro aplicada, superior a la media del mercado, y la tecnología empleada en este proceso, son los principales elementos diferenciadores de las joyas Lannel, confiriendo a sus productos la apariencia de una auténtica joya de oro macizo, permaneciendo siempre como nueva aún después de mucho tiempo de uso.
Las piezas bañadas en oro Lannel contienen hasta 4 micras de espesor de oro, lo que las sitúa muy por encima de los requerimientos exigidos en la Comunidad Europea, que califica como piezas bañadas en oro las que contienen entre 1,5 y 3 micras.
Recientemente una mejora técnica ha permitido que la tercera capa de oro de 22 kilates (“flash”) tenga exactamente el mismo tono que los baños anteriores, por lo que si con el paso del tiempo esta capa se desgastase la pieza seguiría conservando la misma apariencia.
Piezas en Rhodium
Para aumentar la calidad de las piezas de rhodium, sobre la misma base de aleación tratada con cobre se aplica inicialmente un baño de plata 925, lo que permite que el baño de rhodium, metal noble de la familia del platino cuyo coste medio es el triple que el oro, sea aplicado sobre una base de metal también noble como la plata. De esta forma, el acabado es mucho más sofisticado y completo.
Al igual que las piezas bañadas en oro, las pertenecientes a la línea rhodium no contienen níquel, lo que asegura que nuestras piezas sean antialérgicas
Lannel sólo utiliza materias primas de primera calidad. La selección e inserción de gemas, piedras, cristales y zirconitas se efectúa a mano, pieza a pieza, asegurando la máxima calidad del producto.
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