Consulta de Psicología Mónica Ferrera

Mi trabajo comienza en el momento en el que una o varias personas con dificultades solicitan ayuda psicológica. Desde el primer encuentro terapéutico y desde el establemiento de una relación humana y de confianza, definimos el problema de forma clara para, inmediatamente, establecer los objetivos conjuntamente y empezar a intervenir en pos de producir cambios a corto plazo. Se consolida de esta manera un "equipo humano", un sistema en el que cada pieza se complementa y contribuye a solucionar el problema. Mi papel como terapeuta es dar luz a los recursos de las personas y proveer de las herramientas necesarias para dar solución a un problema. El papel de la persona es autoconocer sus propios recursos, y desarrollarlos siguiendo las orientaciones terapéuticas hasta solucionar de forma definitiva su problema. Una vez logrados los objetivos marcados, la fase final de la terapia consiste en una supervisión para asegurar que los cambios logrados permanecen en el tiempo, de que no hay recaídas, y de que la persona es independiente y tiene recursos para afrontar solo futuras dificultades.